El Toyota Celica GT-4 (ST165), el primer anti-Lancia
El dominio de los Lancia Delta Integrale empezó a resquebrajarse en 1988 cuando Toyota presentó su primer Celica de cuatro ruedas motrices.

La decimotercera edición del Rally El Corte Inglés, se celebró del 27 al 29 octubre y contó con un itinerario de treinta y un tramos que sumaban un total de 377 km cronometrados.
Con este coche, en 1990 Carlos Sainz logró, por primera vez, batir a los Lancia y ganar el título de pilotos.
La prohibición de los coches de Grupo B al finalizar la temporada de 1986 y su sustitución por los Grupo A, basados en vehículos de serie, animó a diferentes marcas japonesas a participar en los rallyes.
Toyota eligió el Celica como modelo sobre el que desarrollar un Grupo A competitivo, pese a que los coches con carrocería cupé no son los más adecuados para los rallyes por su longitud, superior a la de una berlina, y su posición de conducción baja, que afecta a la visibilidad de los pilotos.
Para adaptar el Celica a las características de un Grupo A, la marca japonesa desarrolló una variante con tracción a las cuatro ruedas y motor turbo de 2 litros y 200 Cv basada en el cupé de tracción delantera. Esta versión, bautizada como Celica GT-4, se detinó en exclusiva al mercado japonés, donde se vendieron las 5.000 unidades que la FIA exigía para homologarla en competición.

La versión para rallyes la desarrolló en Alemania el equipo Toyota Team Europe, dirigido por el expiloto sueco Ove Andersson. El motor se pontenció hasta unos 300 Cv, el máximo que permitía la brida reglamentaria que restringía el caudal de aire de admisión. Si bien en cuanto al motor el Celica no tenía ventaja frente a la competencia, en la transmisión las cosas eran distintas.
El GT-4 utilizaba una caja de cambios de 6 relaciones de la marca X-Trac y un diferencial central hidráulico mñas eficaz que el viscoso Torsen montado en los Lancia Delta, que dominaban el campeonato desde 1987. La caja X-Trac desarrollada para rallycross, era ligera, muy compacta y permitía su instalación junto al motor transversal del Celica.
El piloto madrileño firmaría con esta victoria un récord histórico que aún sigue sin romperse, acompañado de su copiloto Luis Moya en su Toyota Celica GT-4 (ST165) del equipo Toyota Team Europa. Firmarían su quinta victoria en el Rally El Corte Inglés, convirtiéndose en el piloto con más victorias hasta el día de hoy. Toyota Castrol Team fue el equipo oficial de Toyota gestionado por el piloto sueco Ove Andersson.

Carlos Sainz no tuvo ningún problema para imponerse en el Rally El Corte Inglés, puntuable para los campeonatos de Europa y España, el piloto madrileño vio como sus rivales desaparecían en los primeros compases de la prueba cuando Bassas del equipo BMW-Blaukpunt rompió un palier; Puras a bordo del Ford Sierra-Marlboro, abandono por la junta de la culata, y Fabrizio Tabaton en su Lancia lntegrale tuvo una salida de carretera.
Así, salvo el trompo en la primera especial, Sainz se limitó a conducir su Toyota- Repsol con tranquilidad hasta la meta salvo en el tramo del circuito en la segunda etapa, cuando olvidó sus llaves en el mono sucio que acababa de cambiarse; el piloto de Marlboro entró en el coche a través del portón trasero de su coche.
José Mari Ponce a bordo del BMW M3, dominando claramente a los “Lancia Delta” italianos, entre los que faltó a la meta Arletti, que rompió el motor. Fue de resaltar la remontada de Borja Moratal del team Opel Kadett-Philips, tras su penalización en la primera etapa o los problemas de turbo de Rivero, que perdió posiciones, así como el abandono de Hergueta en los últimos tramos a causa del embrague.

El mejor en el grupo N fue Toñi Ponce a bordo de un BMW, mientras que el primer “R5 GT turbo” fue el local Marrero, siendo Piñon el mejor entre los habituales de la Copa.
En esta última etapa hubo algo de niebla, lo que no impidió el éxito popular de la prueba, corroborado con el colapso casi total, debido a la presencia de aficionados, de la llegada.